Ella es mi madre, y murió ayer por cáncer. Odio el cáncer.
Lo odio con toda mi alma. Saber que tienes una enfermedad que es imposible de
curar. Llegas al hospital un día, por alguna molestia que tengas en algún
rincón de tu cuerpo, y tras un sinfín de pruebas, te dicen que tienes cáncer,
que te vayas a casa y que te despidas de tus seres queridos. Vas a morir, sí o
sí. Odio el cáncer.
Ahora tengo que recoger todas sus cosas, y creo que esto es
lo más difícil que he hecho en mucho tiempo. Tener que guardar su ropa en
cajas. Sus pantalones negros, su camiseta roja. Esa era su camiseta favorita,
porque le gustaba el rojo, decía. Nunca me dijo el por qué, pero creo que ella
tampoco lo sabía, simplemente, le gustaba ese color. Toda esta ropa se quedará
en estas cajas mucho tiempo, esperando a que alguien las vuelva a abrir, a que
alguien se vuelva a poner esa camiseta roja. Desde luego, ese alguien no seré
yo. No creo que tenga el suficiente valor como para volver a abrir estas cajas.
Todo su armario está vacío. Su armario, y su habitación. Es
hora de decir adiós. Un adiós a todas sus cosas. Un adiós a mi madre. Adiós,
mamá.
Yo era su única hija, y su única familia. Mi padre nunca
apareció, y nunca le llegué a conocer. Mi madre siempre bromeaba con ello, porque
decía que se fue para dejarle a ella sola con el marrón de tener que elegir un nombre,
y es que le costó bastante. Pero al final me llamó Valeria. El motivo de mi
nombre tampoco lo sé.
Esteban me está ayudando a recoger todo esto. Creo que sin
él no podría. Es mi novio, y es lo único que me queda. Le estoy esperando
abajo, en la entrada del edificio, a que baje la última caja. Ahí está, moreno,
ojos marrones y sonrisa perfecta. Baja con una caja.
-Esto es lo último, y ¡mira lo que he encontrado!- me dice
señalando lo que parece ser un libro encima de la caja.
-¿Qué es? Dámelo.
-Estaba en la habitación de tu madre, cógelo. Yo ya me voy
con todas estas cajas, mañana nos vemos- se despide sonriendo, mientras que se
aleja con la furgoneta y las cosas de mi madre.
No sabía que había libros en casa, qué raro. De todas
formas, voy a leerlo, si esto es lo único que me queda de ella.
Página1:
10-Mayo-2011
Soy Olga Méndez, y si escribo un diario, es para nunca olvidarme de
lo que soy y de lo que he sido. Y es que ahora, con 17 años, he considerado que
ya es el momento de plasmar mi vida en un papel.
Para situarte, quiero aclara que los tiempos que corren ahora no son
buenos. Hace ya 2 años que empezó la crisis en la que ahora estamos atrapados…
solo espero que dure poco.
15-Mayo-2011
Estamos artos, esta crisis no es nuestra, es SU crisis. Por eso ha
nacido el movimiento 15M, en el que todos los indignados, hoy, nos hemos manifestado en Cibeles.
18-Mayo-2011
Ayer por la noche desalojaron sol. Tras la manifestación quedaron 40
personas en Sol, que decidieron acampar en la plaza para seguir la protesta. Los
policías, violentamente, les echaron. Hoy hay concentración.
Dos horas después de empezar la concentración no dejaba de llegar
gente a la puerta del Sol. Tras el desalojo de la Acampada Indefinida de Sol,
las redes sociales no han dejado de hablar de esta convocatoria por la que ya
han pasado durante estas casi tres horas unas 10.000 personas.
En una breve asamblea, los participantes hemos decidido quedarnos en
Sol hasta el 22 de mayo, día de las elecciones. Hasta entonces, cada día a las
20h se convoca a una reunión para seguir organizando la protesta. Nuestro
objetivo sigue siendo el mismo: permanecer en Sol hasta el 22M y denunciar las
contradicciones del sistema capitalista y de la democracia bipartidista.
Queremos una democracia real.
Página2:
13-Junio-2011
No he podido escribir en los días anteriores, ya que estuvimos
acampando en Sol hasta ayer mismo. En las elecciones, ganó el PP por mayoría
absoluta en casi todos los lugares de España.
Este diario no es de mi madre. Es de su abuela, la “abuelita
Olga”
No tenía ni idea. ¿Manifestaciones? ¿La policía no actuó de
inmediato? No lo entiendo. Aquí no hay
manifestaciones.
En el año 2040, hace 32 años, el pueblo español intentó
revelarse. Fueron pocos los que participaron. Perdieron. Con ellos, se fueron
todas las esperanzas. Con ellos, toda la libertad del pueblo español
desapareció. Con ellos, las mentes revolucionarias desvanecieron, dando lugar a
mentes mansas, dejando que los gobernantes pensasen por ellos, manipulándoles.
Ese fue el último intento de rebelión por parte del pueblo.
Ahora me doy cuenta de ello. Nunca antes había pensado así.
Bueno, nunca había pensado ni reflexionado sobre esto.
¿Democracia real? ¿Querían una democracia? En el colegio,
habíamos dado la historia de España muy por encima. Sé que hace mucho tiempo
hubo una dictadura, donde Francisco Franco, El Caudillo, era su gobernante.
Según mis profesores, fue la época de máximo esplendor en España. Cuando murió,
todo cambió y España fue una democracia, trayendo consigo en caos y desorden
del país. Nos dijeron que hubo una crisis, sí, pero dijeron que fue por culpa
de los ciudadanos, que vivieron por encima de sus posibilidades. Así lo puse en
el examen y así me lo creí. Por lo visto, no fue así, pero… ¿Por qué? ¿Por qué
no me lo contó mi madre? ¿Cómo puedo saber qué es cierto y qué no es cierto?
20-Noviembre-2011
Las
elecciones las ha ganado Rajoy. Con mayoría absoluta, el PP gobierna en toda
España. Ya nada puede ir peor, estamos perdidos.
Algunos dicen
que Zapatero ha sido el peor presidente que ha tenido España, pero es que ahora
vamos a tener al que perdió dos veces contra él. No sé qué estamos haciendo.
9-Abril-2012
Rajoy ha
empezado bien. Aparte de la reforma laboral, y del aumento indudable de paro,
ya quiere recortar 7.000 millones en educación y 3.000 millones en sanidad. Es
un país de locos.
Todo el mundo
tiene derecho a una buena educación y por supuesto, a una buena sanidad. No lo
he contado, pero los inmigrantes que vengan a España sin papeles, no tienen derecho
a una tarjeta sanitaria, y por lo tanto, no tienen derecho a la sanidad.
Página3:
Que paguen la
crisis sus culpables, son los bancos, y no nosotros, los que han metido la
pata. Y son los bancos, y no nosotros, los que tienen que pagar todo esto.
Porque mientras que el pueblo español se empobrece, los banqueros y los más
ricos se van beneficiando cada vez más. Las clases medias están bajando de
categoría. El pueblo se empobrece.
¡¿Elecciones?! ¡¿Educación y sanidad pública?!
Hace solo 61 años España era otra España. Ahora, quién se
plantee el poder de El Grande, está muerto. El Grande es el gobernante de
España, y está siguiendo los pasos de Franco. Nunca me he planteado cómo ha
llegado al poder. Cuando nací, él ya estaba ahí, y durante estos 29 años, ha
seguido ahí.
Ahora, la educación es privada, y solo los privilegiados se
han podido permitir entrar en un colegio. Yo pude ir, pero porque mi madre se ganó
el dinero como pudo. La sanidad, al igual que la educación, es privada. Y las
curas de enfermedades como el cáncer, no están a nuestro alcance. Por eso, odio
el cáncer.
15-Noviembre-2012
Había perdido
el diario, y por eso no he escrito hasta ahora. Ayer fui a la segunda huelga
general en este año. La anterior fue el 29 de Marzo. Los antidisturbios cargan
cada vez más rápido. España cada vez va peor.
Ya estamos
peor que Portugal y Grecia. Nos van a rescatar. En Europa, no, en el mundo
entero, nos ven como unos vagos. Esto no me gusta.
En el colegio nombraron esos países solo una vez. No sé siquiera
si existen.
Los ciudadanos españoles vivimos en la ciudad de Madrid,
limitada por una muralla. No se puede salir, ni entrar.
Ya es tarde, me voy a ir a la cama. Hoy ha sido un día largo
y confuso. Al cerrar el libro, se cae un papel en el que hay una dirección y un
nombre escrito.
Ha pasado un año desde que busqué la dirección que el papel
me indicaba. Desde que encontré esa casa junto a Esteban. Hace un año que
empecé a conocer la verdad de todo este engaño. Hace un año, pasé a formar
parte de La Resistencia.
Y es que aquella dirección era la del cuartel general de La
Resistencia. Mi madre formaba parte de ella. Ya sé por qué le gustaba el rojo.
Era signo de revolución.
Vivimos en la ciudad de Madrid amurallada, aislándonos del
mundo. Antes llegábamos a pensar que éramos los únicos en este mundo. Y eso es
mentira. Tras esas murallas, hay un país abandonado. España abandonada. Más
lejos, está Europa, recuperándose de la mayor crisis que ha tenido en la
historia. Tras esas murallas, hay civilización, muy distinta a la que vivimos
aquí, al otro lado de la muralla.
Los ricos que tanto se aprovecharon de los españoles, ahora
viven todos en las Islas Baleares, con su mundo ideal, con su yate y su
apartamento a pie de playa. Mientras que nosotros nos pudrimos aquí dentro.
Efectivamente, El Grande es un dictador. Nuestro dictador, que a lo largo de los
años, ha ido manipulando al pueblo español, privándoles de tener siquiera
ideales. Prohibió todos los libros que daban a qué pensar. Prohibió todo el
cine que le contradecía. Prohibió nuestros derechos.
Y el pueblo, como tonto, dejó que esto ocurriese. ¿Dónde
está ese espíritu revolucionario? Está, escondido, pero está. Somos pocos, pero
La Resistencia, resiste.